
Con la llegada de los primeros fríos del año, se lanza nuevamente la convocatoria para colaborar con la campaña “Doná calor, doná un abrigo”, destinada a acompañar a familias en situación de vulnerabilidad que asisten a los merenderos locales.

Impulsada por la Municipalidad de Unquillo en articulación con la Mesa de Merenderos, que integra el espacio Unquillo Solidario, esta iniciativa no sólo apunta a recolectar frazadas, camperas y lana para confeccionar colchas, sino que también convoca a la ciudadanía a participar activamente en las Jornadas de Tejido Solidario que se llevan a cabo en el Parque Integrador los días 10, 17 y 24 de mayo.
La campaña convoca a vecinos y vecinas a sumar su aporte de múltiples maneras: desde la donación de mantas o prendas de abrigo, hasta el compromiso de tejer cuadrados de lana que luego serán unidos en colchas para ser entregadas a niños, niñas y familias de los merenderos. También se reciben insumos como lana y agujas para quienes deseen colaborar tejiendo.
Los puntos de recepción de donaciones incluyen instituciones puntuales como los merenderos Corazones Contentos y Con Panecitos de Vida, el área de Desarrollo Comunitario en el edificio municipal, y el Centro Vecinal San Miguel, entre otros espacios.
La edición 2025 da continuidad al esfuerzo solidario realizado el año pasado, cuando en sólo dos meses se lograron entregar más de 100 frazadas de polar —adquiridas con fondos municipales— y colchas tejidas a partir de 385 cuadraditos de lana confeccionados por tejedoras y tejedores voluntarios de Unquillo y Río Ceballos. La comunidad artesanal, comercios locales, y numerosas personas anónimas también se sumaron con generosidad y compromiso.
“La Mesa de Merenderos es una construcción colectiva que adquiere un gran valor para el Estado Municipal en este contexto”, expresó la lic. Marilina Hidalgo, directora de Desarrollo Comunitario de la Municipalidad de Unquillo. “No solo se aporta en la contención de la situación social, sino que buscamos transformar la realidad desde el trabajo conjunto con quienes están más cerca de las necesidades cotidianas”.
En un contexto de creciente demanda social, esta campaña vuelve a demostrar que la solidaridad es un puente necesario entre la urgencia y la esperanza, y que cuando las políticas públicas se construyen en red con la comunidad, el abrigo llega más lejos que el frío.
